lunes, 29 de marzo de 2010

El parto

Jenny una médico que estaba hospedada en casa de mis abuelos me preguntó:-¿Cómo te sentís para el parto Iskra? ¿Estás lista? ¿Nerviosa?. Estaba de visita en el apartamento y tomábamos té. Mi mamá también estaba ahí. Llegó con mi hermano menor desde Costa Rica para apoyarme en el parto y los primeros días.
-Mirá Jenny- le dije- el bebé (supimos que era niña 5 días antes de que naciera) ya está dentro y aunque baile, cante misa o me pare de cabeza, va a salir. ¿Cómo? No sé y con tal de que salga, no me importa. El cansancio que tengo ya llegó al límite, no puedo dormir bien, pesa mucho. Así que ya estoy lista. Si tengo miedo, como es lógico, pero pretendo aguantar hasta donde pueda y no hacerme la valiente innecesariamente, por mí que nazca hoy.

El apodo que me dieron estando embarazada era: Pita con nudo y creo que eso lo explica todo. El último mes es y fue cuesta arriba, eterno. Fryda estaba prevista para el 5 de agosto, pero yo quería que naciera el 2.
Así como la patrona de Guatemala es la Virgen de la Asunción, la patrona de Costa Rica es la Virgen de los Ángeles y su día es el 2 de agosto. La iglesia de la Virgen de los Ángeles en Guatemala está situada en Santa Elisa Zona 12 a 3 cuadras del apartamento donde vivíamos. Fue en esta iglesia donde Ricardo fue bautizado e hizo su Primera Comunión. Fue esta iglesia la que elegimos para casarnos y fue donde se hicieron los servicios cuando Ricardo falleció y donde bauticé, sin él, a Fryda. Es nuestra iglesia, es nuestra Virgen y es la fecha ideal para Fryda.

Nos reunimos el 1 de agosto con la familia de Ricky en casa de sus papás y poco a poco empezó a llegar todo el mundo. Me instalé en un sofá todo el día a descansar cambiando de posición a cada rato. Como siempre había un sinfín de películas para pasar la tarde viendo y el embarazo es un comodín, no movía ni un músculo para hacerme llegar comida, todo me lo iban a dar en la mano. Estaban los tíos de Ricky , los primos, los hermanos y todos se me quedaban viendo con cara de: “Esta pobre va a reventar”. Yo notaba las miradas y sonreía pero nadie me lo decía. El único que se acercó fue Dino:-Mano, vos de hoy en la noche no pasás. Tenés una cara de quiero parir! ….Yo apuesto lo que sea, pero vos mañana estas chineando a tu chilpayate!Me sacó la risa.

Desde la mañana de ese día, creo yo, tenía contracciones, lo que pasa es que ¿quien te explica como fregados es una contracción? ¡Nadie! Ni las mamás, ni las suegras, ni las cuñadas ¡nadie!. Yo había leído que había unas contracciones preparatorias al parto, las contracciones Braxton Hicks y asumí que eso eran porque el dolor no era alarmante. Según yo iba a ser un dolor que me alarmara y que yo iba a saber de inmediato: voy a parir. Ni sé desde cuando exactamente las tuve. El asunto es que viendo la película me llegaba el dolor, solo arrugaba la nariz, la cara en general y cuando el dolor se iba, pues, desarrugaba la cara ¡ignorando completamente la contracción por ver la película! Y mientras tanto, comiendo carne, guacamol, frijoles, chorizo, longaniza, tortillas, etc. Las reuniones en casa de los papás de Ricky siempre eran similares a una fiesta así que ese domingo regresamos al apartamento a las 11:00 pm. Mi hermano y mi mamá se fueron a dormir y nosotros también sin casi mediar palabras.

A la 1:00 am. Me desperté, no entiendo porqué y en ese momento me pregunté: -¿Será así como siente una cuando va a nacer el bebe? Poniendo cara de extrañeza y moviendo los ojos de un lado para otro me quedé sentada queriendo distinguir algo raro…..nada. En eso me llegó el dolor, soportable, igual a los famosos “cólicos menstruales”. Es un dolor difícil de explicar, va desde las rodillas hasta la cintura y es como si alguien se abrazara a esa área y se colgara de vos. Haciendo presión hacia el suelo, se siente un peso. Seguía preguntándome si así debía sentirme y fui a despertar a mi mamá.
Mi mamá, cuando uno la despierta a medio sueño, reacciona como si estuviera drogada, puede decir cosas sin sentido y en realidad ni abre los ojos. La moví del hombro y le dije:
-Ma, me duele, pero no sé si son dolores de parto, ¿me ayudas a medirlos a ver cuanto tiempo hay entre uno y otro?. La volví a mover-Ma, Mami.
-¿Ah? ¿Ah? Si, dame un reloj. Ella y La chupitos hablaban igual. Estaba muy cansada y desvelada.
Nos fuimos a la sala y ella iba envuelta en su edredón. Parecía borrachita o niña chiquita cuando la despiertan para ir a la escuela y le vale madre apurarse a bañarse. Se sentó en el sillón haciendo un cono con el edredón, como tienda de Siux , y le costaba abrir los ojos para ver su diminuto reloj. Los dolores eran cada 8 o 7 minutos y empezaron a intensificarse. ¡Oh Dios! De solo acordarme creo que me duele.
Yo empecé a caminar por todo el apartamento chasqueando los dedos mientras cada dolor duraba y luego me sentaba. Ricardo encendió la luz desde que fui a despertar a mi mamá pero se quedó en la habitación literalmente viendo el techo y no decía nada. Ahora me detengo a pensar lo nervioso que ha de haber estado. Mi mamá cuando no había dolor se volvía a dormir sentada. En ese momento me molesté, ahora me da mucha risa, pero los dos no eran la ayuda que yo imaginé. Llamé al ginecólogo quien apenas iba a acostarse a dormir y al darle los datos me dijo:
-Iskra, llámame cuando los dolores estén cada 5 minutos o si rompe fuente.

Los dolores se intensificaban y yo sentía que los mitigaba un poco caminando, lo cual hizo que la dilatación fuera rápida. A las 5 de la mañana los dolores eran verdaderamente alarmantes, si caminaba o no, daba lo mismo, dolía igual o más, de igual forma yo caminaba pero la duración entre un dolor y otro era de: 1 minuto, 8 minutos, 7 minutos, 6 minutos. Ya desesperada le dije a mi mamá-yo llamo al doctor-no pero si te dijo que cuando fueran cada 5 y tenes de a 8 , de a 7.
¡Yo ya estaba de malas! Y cuando caminaba con los dolores, recitaba el diccionario de malas palabras en todos los modismos que me sé. Y le dije, muy molesta y en tono muy fuerte:
-¡¡¡¡Sumá todas las duraciones y sacá el promedio y te aseguro que dá menos de 5!!!! Llamé al doctor y me dijo:-¿Ya están cada 5 minutos?-si. Mentí-Bañate, vestite y nos vemos en el hospital
¡¡¡¿Qué me bañe?!!! Ricardo se molestó por todo el palabrerío soez que utilicé y optó por no hablarme. Me metí al baño y tan sólo quitarme la ropa interior fue una tortura. Para este momento los dolores habían cambiado, ahora eran como una corriente eléctrica que hacía vibrar desde la baja espalda hacia el ombligo, mi vientre parecía ser una parte ajena a mi cuerpo. ¿Cómo pretendía éste señor que me bañara? ¡Si sin dolor era toda una odisea! En el baño estaba mojándome cuando pensé, literalmente: “¡su abuela! Yo no me baño, a quien se le ocurre pretender que pueda bañarme ¡con estos dolores!”
Me salí y ahora ¿Cómo me vestía?. Salí del baño a pedir auxilio y ellos estaban arreglándose muy calmados. Era como si fueran a salir sin mi y yo con los dolores que iban y venían. Ellos pasaban de un lado a otro preparando sus cosas, la cámara, que si les daba hambre, que si iba a tejer. Cualquiera que haya visto los Thundercats y sepa quien es Munrra sabe como me puse.
-¡vístanme que soy yo la que va a parir!. Y otro dolor que me hizo agarrarme del marco de la puerta del baño.
Ricardo solo me miraba con ojos de enojado, pero no decía nada. ¡Más me enojaba yo!
Al terminar de vestirme, con la ayuda de mi mamá, nos fuimos al carro. Pasar por los túmulos(muertos) para salir del condominio fue tan doloroso que lo vuelvo a sentir. Y también pasar por una calle adoquinada que va desde la Atanasio Tzul hacia el Parque de la Industria fue otro calvario.

Llegamos al hospital El Pilar, yo iba hecha una fiera. Me hicieron el primer tacto, ¡¡¡¡horrible!!!!! Eso sí que es invasivo!! 8 centímetros. Me llevaron en camilla a la sala de partos y me rompieron la fuente. A Ricardo le dieron la ropa para que presenciara el acontecimiento y estaba cambiándose cuando mis dolores cambiaron. Ahora sí que era en serio, yo estaba físicamente cansada y en este punto me asusté. Con mi ginecólogo tuvimos buena relación desde el principio y habíamos acordado que yo me iba a “portar bien”. Le agarre la mano y le dije:
-Yo sé que prometí portarme bien, pero ya no puedo más, deme algo que baje un poco los dolores y prometo poner de mi parte. -ok, enfermera llame al anestesista. Yo creo que él pensaba que ibamos a estar un buen rato esperando por esos dos centímetros.-No está doctor dijo con una calma que ofendía.-¿Cómo que no está? ¿Y el de turno?-No ha venido, con voz de aburrimiento.-Llámelo para ver por donde viene.Hubo un cierto silencio y escuché:-dice que viene dentro de media hora.

En ese momento supe que iba a ser parto natural y con dolor. No había opción. Tal vez Edwin, mi ginecólogo no pensaba igual pero yo sabía que en media hora ya habría nacido.Yo no tenía un Pediatra, y el ginecólogo nos contactó con un amigo suyo para que nos atendiera en el parto a la bebé. Éste llegó en ese momento y empezó a platicar. Contó que había comprado una bicicleta nueva que la anterior la había vendido, que estaba contento por la compra. Y yo ofendidísima de que hablara de eso mientras yo me retorcía de dolor. En ese momento los dolores cambiaron por última vez, todo fue cuestión de minutos o segundos. Sentía la electricidad en el vientre pero esta vez mayor cantidad de kilovatios, los dolores me levantaban de la camilla. Era como si una mano invisible con electricidad me agarrara de la cintura hacia el techo. Alcancé a Edwin del brazo y le dije:
-Ya, ya va a nacer-no Iskra, tenés 8 centímetros de dilatación, por favor no vayas a pujar o lastimás a la bebé Le apreté el brazo y le dije con la voz muy temblorosa:-No, ya va a nacer.El me vio muy seriamente a los ojos y decidió hacer el segundo tacto. Y me dijo:-Iskra, tenés diez centímetros, ahora vamos a hacer todo lo que habíamos prometido, enfócate en lo que te diga, haceme caso y seguí tus instintos como hasta ahora. A partir de ese momento los doctores y las enfermeras se convirtieron en la ultra (roja o morada dependiendo el país). Me gritaban, por decirlo de alguna forma, palabras de aliento y motivacionales. Y pujé, con todas mis fuerzas, no salió a la primera, ni a la segunda. A la tercera es la vencida. Al salir inmediatamente los dolores terminan como si nada hubiera sucedido. Eso sí que me llamó la atención.

-¿Que hora es?- pregunté-las 7:10 am
Escuché el grito, corrijo, el alarido de Fryda. Lo escucho ahora mismo que lo recuerdo. Todo es tan confuso en ese momento, suceden muchas cosas, pero su sonido está por encima de todo lo que sucede. La limpian y la ponen en mi pecho. Toda la cara del papá de Ricky incluyendo sus colochos, el cabello rojo. Y le dije:
- Fryda, cosita, ya saliste.
Ella dejó de llorar, y abrió los ojos extrañada viendo hacia todos lados y reconociendo mi voz. Me la quitan y mido la distancia que va teniendo conforme se la llevan, calculándola por el volumen del alarido ininterrumpido.
Ricardo quedó vestido y alborotado. No dio tiempo de que estuviera presente. Edwin le había dicho, tome, vístase y ya vengo por usted. Pero por atender el parto nunca fue a traerlo. Tengo entendido que al llevarse a Fryda de mi pecho se la dieron a él por otra puerta y luego se la llevaron a la sala de los recién nacidos. Era un lunes.
Es después de esto que el cuerpo “colapsa”. Estaba tan cansada que no podía moverme y no podía abrir los ojos solo escuchaba. Me entró un frio en el cuerpo terrible y temblaba involuntariamente. Las enfermeras me cubrieron con tres ponchos y me llevaron al cuarto que me correspondía. Fue así como me convertí en mamá.

jueves, 18 de marzo de 2010

Capuccino

Su voz me gustó, era un poco más grave de lo que la imaginé. La voz para mi es un factor importante para activar o no mi interés en un hombre, además de que observo todas las actitudes y miradas.
Empezamos bien, formuló la pregunta correcta, hablar con un café...cualquier otra cosa tendria como resultado una negativa. Soy muy selectiva con mis salidas, no puedo darme el lujo de desperdiciarlas, las escojo bien, las planifico, deben darme algo a cambio: mi tiempo vale mucho ya que el ser mamá absorbe mucho también y sé perfectamente que pocas personas van a salir con lo del café.

Llevo encima una etiqueta muy complicada: viuda, es increíble la variedad de reacciones que esto genera en la gente: "¡Ay! ¿es viuda?, ¡cuánto lo siento!, ¿y tan joven?" o, "yo me muero si mi esposo se muere, yo no podria vivir... ¿como le hizo?" o, " bueno, pero Dios sabe lo que hace, hay que resignarse, usted está joven alguien va a querer casarse con usted" o el "debes aferrarte a la mano del Altísimo, yo conozco gente en la iglesia que tiene temor de Dios, te los podría presentar, es más deberías ir al grupo de la iglesia que es muy bonito"...
Colecciono ese tipo de comentarios y cuando creo que he escuchado el peor aparece uno nuevo. Pero por otro lado también colecciono proposiciones "indecorosas" o "fans" que aparecen como por arte de magia. Al principio realmente me escandalizaba, estando a cargo de una empresa perdi a un cliente importante por negarme a negociar en privado,todas las proposiciones se centran en lo mismo, no es que yo sea una barbie o me crea el centro del universo. La gran mayoría busca algo para pasar el rato; algunos son directos, otros lo disfrazan de broma, hay quienes se ponen muy nerviosos y quienes lo dicen con la mirada... pero poco a poco me he ido acostumbrando, simplemente desconfio de alguien que se interese sin tomarse con calma el tiempo de conocerme realmente, no es a mi a quien buscan y ahora reconozco la propuesta antes de que la planteen. Por alguna razón que desconozco ellos asumen que la viudez es sinónimo de desesperación en todo sentido, creen que una busca proteccion económica y además que estás a punto de convertirte en monja... Pero él sin saberlo obtuvo el sí con su pregunta.

Soy una persona muy calculadora y por las experiencias pasadas un tanto paranoica, sabía que él tenía información mía y yo de él solo conocía el color de sus ojos además de que era profesor. Estoy en un programa social en una universidad estatal , donde becan a mujeres, madres, solas por divorcio o por viudez para estudiar administración de empresas, enfocado en la microempresa para que desarrollen una y puedan salir adelante. Nos proporcionan todo lo necesario: alimentación, libros, hasta el dinero para el transporte; lo único que exigen es no faltar nunca, hasta compromiso firmamos. El programa es conocido por todos en la facultad y de alrededor de 100 personas que aspiraron a ingresar en él 40 fuimos las elegidas, de las cuales únicamente yo soy viuda. El resto son mujeres que además de ser abandonadas por su pareja fueron agredidas tanto física como psicológicamente. La mayoría no ha terminado la secundaria y es por esto que para Ju y para mi ha sido dificil asistir a clases ya que el grupo hace preguntas y comentarios "impertinentes"- según Ju y yo.

El final del programa se acerca con la exposición de nuestros proyectos y un premio en efectivo para el mejor, esto para darle arranque así como diferentes tipos de apoyo. Por la competitividad del asunto y el reconocimiento hecho público por la directora del programa de que tanto el proyecto de Ju como el mío son los favoritos, nos ganamos el repudio de la concurrencia. El mejor comentario de todos, o al menos el que mas gracia me dio fue que tanto Ju como yo: "necesitan adecuación curricular, siempre viven levantando la mano y preguntando cosas". La ignorancia es atrevida. Aunque no dejan de tener razón, necesitaríamos adecuación, pero no por estar por debajo del nivel académico de la media sino todo lo contrario.

-Un café me parece bien- le dije y le sonreí. El sonrió tambien, derretible y nos dirigimos a la salida. Caminábamos hacia "La Calle de la Amargura", así se llama, es la típica calle social con bares,centros de fotocopiado y restaurantes que quedan cercanas a las universidades

- ¿cómo te llamas?- le dije queriendo hacerlo sentir confiado en su invitación.

-Andrés, ¿ y vos?

-Amanda

-Ese carro que ves ahi es el mío...-puse cara de pocos amigos-...pero por la cara que pusiste asumo que iremos cerca de aquí, ¿cierto?- tranquilicé el gesto- tranquila, no voy a hacerte nada.

- Conozco un buen lugar donde tomar café por aquí-le dije- evadiendo el comentario. Empezamos a caminar

-¿Cuántos hijos tenés?

- Una-y sonreí para mi. Estaba oscureciendo pero el clima era perfecto

-Sé que sos la única viuda del grupo-

Error-pensé-Comentario fuera de lugar. No me gusta esa etiqueta. Sonreí y traté de ordenar todas las respuestas que se me vinieron a la mente: unas amables y otras... sarcásticas y groseras.

-Lo soy- le dije- pero eso importa porque....?

- me hace admirarte, - dijo con tranquilidad.

¡Por Dios! eso es decir lo que alguien quiere oir-Gracias- sonreí más y bajé la guardia un poco. Pensé en un amigo que jura que siempre estoy a la defensiva y que asegura que es la razón por la que no tengo pareja. Caminabamos a paso lento y no nos mirábamos mucho. Llegamos al lugar: éste es un lugar donde suelo ir cuando me deprimo. Voy sola a pensar, es de los pocos lugares que conozco, tienen el mejor café y el cheese cake mas increíble que he probado.
La señorita que atiende me reconoció y nos saludó con mucho entusiasmo, entendí que su alegría se debía a la costumbre de verme siempre sola. Nos dio una mesa especial para dos, muy bella, redonda, pequeña, con un sillón rojo que la rodeaba y un poco retirada del resto. Nos sentamos un poco alejados el uno del otro, lo mas frente a frente que se podía y me dijo:

-¿Por qué aceptaste mi invitación?.

Agua fría sobre mi, ordenando mis ideas a la velocidad de la luz, nervios, el corazón en la garganta

- ¿Qué van a tomar, su capucchino como siempre?

viernes, 12 de marzo de 2010

Esta nueva magia....

He odiado muchas veces estar en clase, oir tanta sarta de sandeces!, sintiéndome como en muchos lugares fuera de lugar, pero no me he ido por orgullo, es la verdad, no ha sido mas que por eso. He de decir que puedo resistir lo poco que me falta gracias a la amistad con Ju, una amistad tan pura y sincera, que he llorado de rabia cuando me ha dicho mis verdades. Ju esta conectada conmigo en todos los planos solo que ella me lleva ventaja en varios aspectos y sobre todo en edad, soy la menor en la clase y la única que no es mujer agredida, (hasta ahi no coincido con la media).

Ese dia llegue hostil, dispuesta a no aceptar impertinencias de nadie, contestando todos y cada uno de los comentarios estúpidos con respeto pero contundencia, Ju gozaba con cada una de mis respuestas y los profesores nos aceptan las bromas, el grado mental de inteligencia y sentido común ya que respetamos pero nos hacemos notar y de lo contrario se frustrarían como docentes.

Tuvimos un exámen para el que no estudié, este trayecto final lo acarreo como quintal de harina en la espalda, me enoja no estudiar, pero mas me enoja ganar con 100 un examen estúpido que no demuestra ser una buena herramienta de evaluación, pero que al final, me va a hacer ganar...y ocho horas para esto!.

Cansada de todo y de nada, sali al corredor, Ju detras mío con un andar mas relajado y un cuaderno para repasar nuestras respuestas, empezamos a discutir varios aspectos que nos incomodan y a estar, como siempre, de acuerdo en soportarlo por el bien de nuestras vidas.

Nos detuvimos delante de un aula en completo silencio la cual asumimos vacía y lo que empezó como comentarios se convirtió en carcajadas......y salió él, de frente a mi y Ju dándole la espalda, ojos profundos azules, pero no claros, muy profundos eso si, demasiado joven para ser profesor, cuando salió me dio la impresión de que estaba indignado, luego percibí curiosidad y se detuvo en seco, esto me llamó mucho la atención, se quedó paralizado por segundos, su rostro era verdaderamente bello, piel blanca, cabello castaño, labios delgados pero con un color natural rojizo y dijo:
- su platica es verdaderamente interesante (y sonrio) pero estoy en examen podrian bajar la voz?

Yo solo sonrei y Ju contestó: -pensamos que el aula estaba vacía, ya nos vamos.

el dice: -no, no tienen que irse, solo hablar mas bajo- lo dijo sonriendo con picardía y entro.

Senti como el calor recorria mis orejas y sabía perfectamente que tenia rojo el rostro. Sentia el corazón hecho un nudo y la garganta cerrada, la respiración entrecortada y los brazos pesados. Trate de recordar si me habia maquillado, si me había alizado el cabello, si me habia vestido bien, si podría yo causar la misma impresión. Fue increible!

Y Ju como siempre, lo entendió todo, lo percibió todo...enmudecí, ella tiene cierta clase de poderes extrasensoriales.
- acabo de presenciar algo increible! -me dijo- son ideas mias o aqui paso un huracán? - Lo dijo mientras me miraba con expresión maravillada. A ella no le puedo mentir, aunque lo intente, yo solo sonreia y sonreia, no podia pensar.

Ausente el resto del día, ida, muda, no se ni que pensaba...no pensaba, no podia pensar mas que en los ojos azules, preguntandome si fue un monologo de sensaciones o un diálogo.

El día paso no se ni como, en el receso Ju me jalo de un brazo para ir de nuevo al aula 447 a buscarlo, muy en contra a las "estrategias de seducción" que utilizo, gracias al cielo él ya no estaba. Por mas que recorrimos la facultad, yo a rastras , Ju decidida y firme, no lo encontramos.De nuevo a la clase a terminar de digerir el día que inicie hostilmente.

Es dificil pasar todo el sábado ahi metida, sobre todo cuando he tenido una semana fuerte. Pero finalmente llegó el momento de "largarme" porque asi lo siento, casi no me despido de nadie, salgo "disparada" hacia mi fin de semana que se resume en el dia domingo. Ya casi cae la noche y el regreso que son 6 kilometros lo hago a pie para desestresarme paso a paso. Al salir me doy cuenta de que los ojos azules estaban esperando, y por dos segundos siento hasta celos: a quien espera?, se acerca y me dice:- te estaba esperando, podemos hablar? que tal un cafe?.....

viernes, 5 de marzo de 2010

HABLEMOS DEL PRINCIPIO...

A los 16 años me gradué del Instituto Angélica Rosa, o como la llamamos sus estudiantes: La Academia de Angélica. Fue después de 3 años de pasar mis años cúspide como adolescente asistiendo a diario a mis clases de canto. No soy producto de otro Maestro que no sea ella. Le vivo muy agradecida porque las atenciones que ella tuvo conmigo no puedo pasarlas por alto, no son cualquier cosa.

Al graduarme quedé como en un Limbo, porque tenía la base pero no tenía “calle”, es decir, experiencia fuera de La Academia en el "ambiente artístico". Estaba a punto de cumplir 17 años, estudiaba el quinto año de Secundaria en Magisterio para Pre-primaria, por lo que me desvelaba mucho. En mi casa la situación económica era insostenible, mi mamá hacía mil milagros diarios para mantener absolutamente sola a 4 adolescentes incontrolables. Recuerdo bien que ella trabajaba tiempo completo y era yo quien se encargaba de la casa, de cocinar y atender a mis hermanos. Por turnos nos tocaba acostar a mi hermano mayor quien está en silla de ruedas a causa de la Distrofia Muscular que le fue diagnosticada. Era muy complicado, no se cómo pero lo lográbamos. Después de acostarlo, alrededor de las 10:30 yo empezaba a hacer mis Tareas del Colegio y muchas veces no dormía. Tengo fotos mías en plena clase del colegio durmiendo y de mis compañeras con caras de: “se durmió”.

Probablemente por la edad, en esa época hice cosas temerarias. Por ejemplo una vez me fui a un concierto sin tener la certeza de cómo me iba a regresar y paré regresando a pie, desde el Estadio del Ejército hasta la 10 calle y 10ª avenida zona 1. Me desmayaría de imaginar que mi hija hiciera algo parecido, por supuesto que mi mamá nunca supo la entera verdad, ella supongo, sigue creyendo que me fueron a dejar y así fue pero no sabe que fue a pie y que me atravesé la zona 1 .

Una de mis actuaciones temerarias iba a tener una repercusión en mi vida difícil de imaginar. Una noche, a las 3 de la mañana, estaba haciendo material didáctico y escuchando la principal emisora de música Rock de 1997 en Guatemala. A esas horas, había un locutor que anunciaba clasificados y escuché el anuncio que daría el giro a mi vida: “Una banda de rock está buscando una voz femenina para ser vocalista, las interesadas deben comunicarse con Jorge a… (Tal teléfono) para que le realicen una audición”. No pasaron más de cinco segundos y yo ya tenía el teléfono y estaba marcando. Lo hice sin pensarlo, fue un impulso que no puedo describir. Concerté la cita para dos días después ,debajo del puente peatonal del Colegio Italiano para hacer mi audición. Debía llevar material para cantar.

Ahora que lo pienso, ¿a que clase de muchachita inconsciente se le ocurre ir, sola, a reunirse con quien sabe quién para irse a meter a quien sabe donde a cantar un par de canciones? Si, a mí. A mi mamá no le mentía, nada más le decía una parte de la verdad: Mami, voy a una audición. Ya dejé todo hecho y regreso antes de las 7. Si yo hacía lo que me correspondía, ella no me hacía líos para que yo saliera, lo que si me pedía era que la llamara constantemente para saber que yo estaba bien, cosa que yo cumplía religiosamente.

Llegué al lugar de encuentro puntualmente y a los pocos minutos apareció un grupo numeroso de muchachos con el pelo largo, uno tatuado, todos con planta de matones, camisetas negras de bandas “gruesas” según yo, todos mucho más altos y grandes que yo. Eran alrededor de ocho. Nos saludamos cordialmente y me explicaron que íbamos al lugar donde normalmente ensayaban. Yo iba muy nerviosa, quería el “trabajo” y no sabía como estaba la competencia, era tímida fuera del escenario, no extrovertida como ahí arriba, iba eso si, como siempre estoy antes de cantar: con un agujero en el estómago. Ellos eran como niños, caminaban molestándose y golpeándose, se notaba que estaban nerviosos, no sabían como comportarse delante de una mujer, eso si era evidente.

Llegamos al lugar, era un terreno muy grande con área verde, con una especie de “bosque” hasta el fondo que iba a dar a un gran barranco, en medio del terreno una casa de dos niveles y mas hacia la entrada una casa de madera como en ruinas, ese era el lugar de ensayos. Adentro tenían colchonetas llenas de polvo y tierra, un equipo de sonido, y los instrumentos: dos guitarras eléctricas, un bajo y la batería, si mucho un par de pedales individuales cada guitarrista, los amplificadores no eran la gran cosa. Ya han pasado algunos años y hay varios detalles que no recuerdo bien. Según recuerdo hablamos poco y me pidieron lo que llevaba de música. Eran un par de discos para cantar “encima”, les expliqué que yo no componía, sino que sólo cantaba. No tenía experiencia haciendo segundas o quintas, eso vino muchos años después. Ellos aseguraron que eso de componer se aprendía con la práctica. (jajajaja)

Eran ocho porque estaban los 4 integrantes de la banda y los amigos que también darían su visto bueno. Todos en los primeros años de la Universidad, de la banda: uno en Medicina, dos en Ingeniería y uno en Arquitectura full San Carlos. Me dieron el micrófono y recuerdo perfectamente que se lanzaron en las colchonetas como niños a punto de ver un programa favorito en la tele y se levantó esa nube de polvo. A mi podía tragarme la tierra en ese momento. Sólo uno se quedó al lado del equipo para manejarlo.

Mi audición fue con Zombie de The Cramberries, una de mis canciones favoritas y con You oughta know de Alanis Morisette además de Don´t speak de No Doubt. Les gustó, ya después de la de Alanis me anunciaron que estaba en la banda pero aun así me hicieron cantar la tercera. Me contaron que en menos de 15 días tenían un "toque" en Rock Teens y que la cantante anterior se salió y ellos debían cumplir con el compromiso. Me dieron un casette con las canciones de ellos cantadas por mi antecesora con quien se llamaban Rosa Negra; pero cantante nueva nombre nuevo y ahora yo pertenecía a: ADN. El nombre que más me gustaba era el anterior pero al no tener ni horas de estar en la banda me pareció de mal gusto hablar al respecto.
Me recitaron el reglamento interno: yo no podía hacerme novia de ningún integrante y debía darme a respetar como mujer ante el público que era despiadado. Las decisiones eran tomadas por votación y con todos los miembros, ahora incluida yo. Después de pasar ahí un gran rato platicando, oyendo sus canciones y conociéndonos regresé a mi casa puntual para dar la cena y para ponerme pronto a aprender de memoria : Nuestra Historia, Otra Vez y 40 cervezas entre otras... para mi primer toque.

A pocos días de mis 30 he meditado...( Pensando en Ricardo Vergara y Hugo Yela)

Llegé a los 30. Gracias Vida, Dios, Alá, Buda, Universo, Astros, Mamá, Papá, Suerte, Destino...llegué a los 30. Y he aqui algunas cosas que he aprendido en este tiempo...

A golpes y porrazos entendí que el objetivo en la vida es Ser. Sin ponerle o quitarle, es solamente ser. No ser feliz, no ser exitos@, no ser poderos@, quitando cualquier adjetivo, solo hay que ser. Y eso es poderoso en si mismo, si se llega a absorber.

El dinero no es la felicidad, pero no tenerlo te puede hacer muy infeliz. Hay que saber vivir teniendo y hay que saber vivir sin él y si logras éste aprendizaje tu corazón será rico y tendrá paz para construir y crear tu prosperidad.

Nada dura para siempre, ni lo malo ni lo bueno. Si estás consciente de esto disfrutarás al máximo lo bueno y tendrás siempre esperanza de un momento mejor.

He cometido muchos errores y si aprendí de ellos es gracias al dolor que me causaron y por mucho que dolieron y algunos no los sano del todo, el pasado es pasado y lo correcto es seguir. (igual que queda)

Ante toda situación mala hay dos caminos: o enfrentarla con buen ánimo, con fe o enfrentarla sintiéndote miserable y sin esperanza. Libre albedrío, igual hay que enfrentarla.

La vida no es una línea recta, es un conjunto de ciclos, se abre uno y se cierra otro. Con cada uno se retroalimenta y se empieza de nuevo. El cambio es constante.

"Dios se rie a carcajadas cuando le cuento mis planes". En cinco segundos tu vida puede ponerse de cabeza. No prepararse a los cambios por venir es una locura y prepararse mucho, también.

Mis logros no han sido a nivel profesional aún sigo en la búsqueda de mi camino. Pero cuando creí haberlo perdido todo, cuando creí que no había aprovechado el tiempo... alguien logró decirme: mami. No puedo decir que logros no he tenido.

Mi mayor logro ha sido mantenerme con vida...y no me refiero únicamente a tener mi corazón latiendo y mis pulmones con aire.

Mi hija no es mi fuerza, yo tengo fuerza porque la tuve para darle calidad de vida y se lo voy a cumplir, se lo debo.

Suelo perdonar la mayoria de cosas y a quienes no logro perdonar, al menos no les deseo lo que me desearon. Ellos hacen su camino solitos, yo gracias a Dios, ni observo.

El lugar donde un@ vive es eso: un lugar. "El hogar está donde está el corazón". Los corazones pueden cambiar y los lugares también.

Para poder amar a otro hay que amarse a un@ mism@ en soledad para así dar y recibir lo que es merecido.Balance es el secreto.(y por aquello de los mal pensados, o mejor dicho, los amplios de mente no me refiero sólo a eso)

Amar no es igual a poseer. El amor sano ama en libertad. Se puede dejar ir a alguien porque se le ama y se le desea su bienestar.

"Mantén a tus amigos cerca y a tus enemigos más cerca " "A los amigos se les cuenta con menos de los dedos de una mano". He comprobado estos dos dichos, los entiendo bien. Aún así, a mis "enemigos" los alejé lo más que pude y mis amigos alcanzan más de ese conteo.

Casarse es fácil, lo dificil es la convivencia. Balance sigue siendo el secreto.

Si con tu espos@ no podés ser completamente vos, sin tapujos o verguenzas, sin secretos y si no le tenés confianza. ¡Estas frit@, que farsa! No se puede hacer buen trabajo en equipo sin equipo.Los dos deben saber qué quiere cada uno como individuo y expresar que quieren lograr como pareja, planear cómo van a lograrlo y hacerlo. Si ésto no se tiene...¿Que diantres hacen juntos?

No le hagas a otros lo que no te gusta que te hagan y si se los hacés tené el valor de tomar de tu propia medicina sin reclamos, porque reclamar cuando vos ya lo has hecho es caer en el descaro. No permitás que alguien te haga lo que vos serías incapaz de hacerle y para esto no hay excusa que valga.

Tener hijos duele, me refiero fisicamente y también cansa. Aun así, no hay cosa mas bella que se le compare y es por eso que una olvida el dolor e ignora el cansancio.

La familia no te abandona. Metafóricamente hablando, tu gente te puede agarrar a trancazos pero no van a permitir que venga un extraño a tocarte un cabello. Siempre van a estar ahi y siempre han estado ahi.

¿Madurar? No se lo que es eso, yo utilizo mi tiempo en Ser.

He experimentado sentimientos muy fuertes. He llorado al ser querido que se fue, me he frustrado por impotencia,he vivido en shock por un período de tiempo, he tenido miedo de morir o que dañen a mis seres queridos. He sentido ira. Ahora, después de un tiempo le perdí el miedo a la muerte, pero a la mia, todavía pensar en perder a alguien querido me da escalofríos, aunque se con certeza, y porque lo he comprobado, que aún así se puede seguir viviendo. En algún momento quise morir, pero no tuve la valentía de proceder...¡salud por la cobardía!. He deseado matar y lo haría sólo en el caso de ser necesario, aunque no me tentaría el alma si ese fuera el caso y lo haría friamente. Viví en un limbo un tiempo...hasta que entendí que la vida vale la pena. Las alegrías tienen más poder que las tristezas y las reducen en insignificancia.

Ahora que voy llegando a los 30. Nada de lo que planee salió como pensaba. He pasado por mucho y sé que eso no me libera de nada. Me siento bien...ni siquiera se por qué. Guío a otra persona cuando a veces pienso que no puedo guiarme a mi misma. A mis 30 agradezco la vida que he tenido, no puedo pensar de otra manera, se de personas que sólo llegaron hasta aqui y otras que ni lo lograron.